Por la mañana, la luna de Acuario sextiliza a Quirón en Aries, engendrando curación. Es posible que conozcamos a personas cuyas luchas pasadas reflejan las nuestras. Al aconsejarles, identificamos al mismo tiempo la solución para nuestras inseguridades personales. Adoptar una visión más objetiva de nuestro pasado es la clave. Al negarnos a dar a las viejas angustias más peso emocional del que merecen, recuperamos nuestro poder y triunfamos sobre la adversidad.
A media mañana, la luna de Acuario se cuadra con Urano en Tauro. Nos sentimos fortalecidos tras el sextil Luna-Quirón. Con nuestra nueva confianza, ¡estamos decididos a no permitir que nadie nos encasille! El único problema es que esta misma idea puede ser una proyección. Suponemos que alguien desea controlarnos del mismo modo que nos controlaron a nosotros en el pasado, por lo que corremos el riesgo de arremeter reflexivamente contra otro, o de volvernos fríos hacia una persona con buenas intenciones.
