Urano

Urano: el planeta de la rebelión

Urano no fue descubierto hasta 1781. Al ser uno de los planetas más exteriores, se desplaza con bastante lentitud por el zodíaco. El resultado es que su efecto se deja sentir más a nivel generacional que individual.

Urano trae consigo una nueva forma de ver las cosas, y su enfoque se afronta mejor con una conciencia expandida. La originalidad, los inventos, los ordenadores, las tecnologías de vanguardia y los acontecimientos futuros están regidos por este planeta. Urano no ve la necesidad del statu quo, prefiere romper con la tradición y crear un nuevo molde. Aunque los elementos básicos (ciencia, electricidad) están a salvo aquí, este planeta prefiere centrar su mirada en un nuevo orden mundial. Para ello, la rebelión, la revolución, los dictadores, un estado autónomo y el libre albedrío caen todos bajo la égida de este planeta.

Nadie calificará nunca a Urano de sutil. Es el planeta que suscita comportamientos erráticos y extravagantes y esquemas bizantinos. Una sociedad bohemia y utópica es más acorde con la inclinación de Urano, al igual que los ideales humanitarios. La libertad y la creatividad son importantes para este planeta; la astrología también entra en su ámbito. Por último, en consonancia con su forma repentina, a veces violenta y a menudo inesperada, Urano rige los terremotos y otros desastres naturales.

Tiempo de Urano: un año.

Urano tarda 84 años en completar su viaje alrededor del zodíaco. Es una energía andrógina y rige Acuario y la Casa Once. Se considera que Urano es la octava superior de Mercurio y el primero de los planetas trascendentales.

Urano es la octava superior de Mercurio y el primero de los planetas trascendentales.